Hotel sobrevalorado. Bonitas vistas del lago de Lucerna, pero........ Las habitaciones no tienen control de temperatura individual, con lo que te asas por las noches en invierno y he leído que en verano te asas también de calor al no tener AC. Las habitaciones estandar no ven Lucerna, las tapa una casa al lado, según me dijeron en recepción para ver Lucerna hay que estar en cuarta o quinta planta y esas habitaciones ya no son estandar. (Información no aportada en ningún sitio por el hotel) Se ve el lago y el monte de enfrente pero no es lo mismo.....
Por otro lado ofrecen un desayuno buffet muy mejorable, tostador lento, falta zumo natural, poca bollería o dulce, en fin por 25 CHF podría estar mucho mejor.
Otro inconveniente es que al ir en coche hacia Lucerna siempre esta atascado debido a un semáforo cercano, calcular unos 25 minutos a determinadas horas. Tampoco el hotel ofrece tarjeta de transporte gratuito como hacen otros hoteles.
En resumen creo que hay mejores alternativas en el mismo Lucerna como Balances etc.
El tener al lado un lago, no exime de necesitar esforzarse por mejoras otras prestaciones.