6/10
Hotel limpio, bien situado y perfectamente atendido por el personal, pero en la habitación hay una pequeña mesa y no hay ni silla ni una banqueta donde poner una pequeña maleta. Para trabajar un rato con el portátil hay que hacerlo en la cama o en el retrete. Otro punto muy negativo: la presión de agua en la ducha es mínima. Imposible enjuagarse el pelo si no es a cuatro patas metiendo la cabeza bajo el chorro del grifo de abajo, que casualmente sí tiene mucha presión. Y los precios del minibar estan absolutamente fuera de órbita. Desayuno muy completo, aunque el café de la máquina sale muy muy aguado.
Fernando
Viaje de negocios de 1 noche