Está lejos del Centro de Granada, pero a nosotros nos venia bien. Se carretera con bastante ruido y mal aislamiento entre habitaciones. Pero la limpieza muy bien, el personal excepcional y la relación calidad precio adecuada. De tres habitaciones, una nos tocó recien reformada y perfecta (salvo ruido ducha de los vecinos) las otras olian los desagües, un poco antiguas pero muy limpias. Las camas algo cortas (mis hijos de 1,90 les colgaban los pies), pero cómodas.
Por último llegaba un poco los olores del bar-restaurante por el que se salia y entraba y que necesita mejorar la extracción de humos y olores de forma urgente.