El hotel está en un edificio remodelado en su interior, bien ubicado (a dos cuadras de una estación de metro), cuenta con un pequeño ascensor de tamaño justo para subir las maletas, La habitación es de buen tamaño para dos personas y muy bonita, contaba con cafetera Nespresso y agua de cortesía. Como aspectos negativos está que en mi estadía de 5 días no repusieron nunca los artículos de baño ni tampoco el café, por lo que la cafetera no servía de mucho si no traías tus propias cápsulas. Como aspectos positivos, la buena disposición del personal de recepción, muy amables y atentos para entregar información de transporte, llamar taxis e incluso imprimir entradas.