La relación precio-calidad está muy distante de ser cercana, para empezar, solo aceptan efectivo, lo que suena a evasión fiscal, los colchones y las almohadas están viejos, el WC del baño de la habitación es un asco, uno de los dos botones para el desagüe, así como la tapa del baño, están rotos, el área de la regadera esta toda percudida... en general, el costo por noche es demasiado alto por lo que se recibe... ya ni que decir de los chilaquiles con pollo, que le pedí al mesero que me explicara en donde estaba el pollo deshebrado y no me supo dar respuesta. Es el segundo peor hotel en mi vida, en el que me he hospedado.