El hotel está en una posición excelente. Es estilo boutique pero en grande.
Solo hay dos cosas que encontré lamentable, por una parte lo caro que es el desayuno casi 40 dólares, y no hay NADA, es inadmisible pagar esto por la comida que hay y el lugar, oscuro y realmente miserable.
Por otra parte, me impresionó el gym, pero patéticas las personas que lo gestionan, en la recepción del gym. Los despedia por si ineptitud y falta de empatía.