Llegamos a media noche con la confirmación de reserva de 2 habitaciones y la encargada me solicito la tarjeta de crédito para compararla con la reserva, situación absurda porque no era la misma ya que lo hice a través de Hotel.com, ya por eso no quería darnos las habitaciones. En verdad, estabamos cansados y no queriendo discutir, tuvimos que darle una tarjeta de crédito para segun realizar un nuevo pago y nos pudiera dar las habitaciones.
Cuando entramos a las instalaciones de las habitaciones, nunca había visto algo tan TERRIBLE. Las alfombras estaban super sucias, creo que el piso de un taller mecánico es mas limpio. Las sábanas, cobijas y fundas de almohadas estaban amarillas, manchadas, sucias y alguna olían a sudor y perfume, parecia que no las habían cambiado, ni lavado. El aire acondicionado estaba sucio. Pedimos cambio de una habitación y el cambio fue lo mismo de pésimo. Sinceramente, el condado de Tallahassee deberia realizarle una inspección a este hotel porque las condiciones de insalubridad de las habitaciones son extremas y más con este proceso que estamos pasando con la pandemia del Covid19. Por mi parte, no regresaré a este hotel y ni pensar en recomendarlo.