Cerca de una estación de ferrocarril, Radisson Blu Royal Garden Hotel es una buena opción de alojamiento en Trondheim. El bar es perfecto para tomar algo en buena compañía; y, a la hora de comer, puedes pasarte por Bakkus, especializado en cocina internacional, que sirve desayunos. A otros viajeros les encanta la amabilidad del personal.