Muy buena hubicacion, al lado de la plaza Marques de Pombal y la Av. de la Liberdade. En general está bastante bien, la habitacion amplia con la terraza estupenda con una mesita un poco vieja y dos sillitas igual pero útiles. La cama enorme, de 1.80m, ell colchon ya acusa el uso, pero no esta mal, almohadas si te gustan altas lo son (demasiado para nuestro gusto)
La recepcion bien, son gente muy joven y amable. Los baños compartidos individuales bastante bien tambien, 4 en mi planta, la cuarta.
Lo peor la insonorizacion de las puertas de las habitaciones que son muy grandes y hacen un ruido enorme sobre todo al cerrar por todo el pasillo y te despiertas si o si.
El desayuno muy escaso, nada de salado, ni si quiera tomate para hacer tostadas con aceite (que tampoco hay), tostadas enanas, solo mantequilla , una mermelada y nutella o simill. Tortitas pequeñas tambien pero estan correctas. Y lo peor de todo es que NO hay sitio donde desayunar, es una mini habitacion con una mesa para 6 personas y nada mas...Por contra pudimos subir un dia el desayuno a la habitacion y desayunamos tranquilos y muichos mas comodos en la mesita mencionada.
Cocina compartida buena, eso si, la nevera es enana para las habitaciones que hay en la planta
Resumiendo para una escapada, sin de semana bien, pero ojo! han de mejorar porque en lisboa hay multitud de competencia y mejores opciones al mismo o incluso mejor precio.
Para una estancia larga mejor otro establecimiento quizas.