Es un buen hotel, el personal correcto, lamentable eso si el desayuno atendido por un hombre siempre de mal genio, y el servicio excesivamente lento, treinta minutos para preparar un omelet, parece que es un contrato con un restaurante que esta en el primer piso, pero el servicio es de verdad pesimo, siempre de mal genio, no hay ni la mitad de lo que ofrecen como opciones de desayuno, no hay azucar, para el cafe,ofrecen jugo y no lo dieron