situado en una zona bien situada, tranquila, comunicada, hay tranvía y bus cerca, y un supermercado, el migros, popular en zurich, aunque de precios altos en general. para descansar es un placer...vistas a la montaña, parece que tiene un colegio cerca porque se escuchan niños a lo lejos, pero solo cuando salen al jardin luego ya todo es paz y tranquilidad. el personal muy amable y la atención exquisita.