Teníamos 2 habitaciones, una de ellas tenia sangre y chocolate en el piso, al pedir el cambio comentaron que no tenían disponibilidad y que tampoco tenían gente para la limpieza de la habitación (hasta el día siguiente) porque ya se había retirado el personal de limpieza.
En el restaurante/bar solo tienen una persona que no se da abasto, en la primera noche se les acabaron opciones del menú y en la segunda nos tocó una persona de origen peruano que de plano (supongo pro el estrés) fue en todo tiempo grosero y sin el menor ánimo de servicio, literal parecía que odiaba su trabajo o a la empresa
En general todo el personal se ve